Como estamos Camaradas? Después de una semana difícil y atareada planeando la gira se llegó el día, Enrique Bunbury se presentaría en Guatemala y había mucho por hacer…
El reloj daban las 9am cuando junto a mi amigo Israel y su novia Ivonne, llegamos al punto de partida que era la gasolinera Puma ubicada en el Boulevard de los Héroes, conforme pasaba el tiempo las camisas de Enrique Bunbury aparecían una por una con nuevos amigos y otros de mil batallas como era el caso de Milo y su esposa, Israel y Pilo, salimos rumbo a distintos puntos estratégicos de El Salvador a recoger gente y a eso de las 12:40m llegamos a la frontera.
Luego de un par de minutos y comprar un Box nos fuimos oyendo Enrique y Héroes en todo el camino la euforia y “Las expectativas” estaban a mil por horas, el trafico muy pesado llegando a ciudad de Guatemala cuando por fin alrededor de las 5:00pm llegamos a nuestro lugar de destino Fórum Majadas.
A lo lejos divisábamos ya el panorama, las camisas de Enrique Bunbury y Héroes del Silencio, era una locura luego vino el intercambio cultural con nuestros hermanos Chapines que después de un par de Gallos y una excelente tertulia la pasamos impacientes esperando la hora cero, cuando escuchábamos la prueba de sonido “El Anzuelo” y “La Ceremonia de la Confusión” estaba más que ansioso por entrar y deleitarme después de un par de horas se abren puertas.
No lo podíamos creer había sido un viaje largo desde El Salvador y el cansancio, fatiga y hambre no nos detendrían estamos con la adrenalina a mil por horas luego de unas cervezas, cigarros y oyendo a The Cure de fondo se apagan las luces y el tiempo se detendría…
Suena el intro de la última canción del álbum Expectativas “Supongo” mientras los primeros en salir fueron los Santos Inocentes, mi garganta estaba preparada para corear “Si te abrazo no tengas miedo, nada lo se de cierto, todo lo se de supongo, el mundo se encarga de asesinar tus sueños, nada se dé cierto todo lo se de supongo”, sin más preámbulo (Me acabo de erizar), vimos todos a Enrique con su traje blanco todo un Gentleman con gafas oscuras e impecable, yo cantaba cada momento y era el momento dar la bienvenida a “La Ceremonia de la Confusión” me volví a erizar, cuando era el momento de “educación para la programación” luego esperaba escuchar ese Saxo de Santi del Campo que nos daba el preámbulo al trance de aquella inolvidable noche.
“Buenas noches Guatemala, venimos esta noche con nuevo disco, estamos los que tenemos que estar, sonaran canciones del nuevo álbum y abra un recorrido por distintas épocas, esperamos que los temas que hemos preparados sean de su agrado” mientras el público gritaba Enrique, Enrique Enrique, luego sonarían los acordes y sintetizadores de “La actitud Correcta” que hizo prender a todos los asistentes, yo me deleitaba cantando y “Citando grupos que están de moda” y sin duda Enrique tu nuevo disco es la hostia, todo pasaba tan rápido que mi garganta se desgarraba y cerraba mis ojos para gritarle al cielo “Es algo parecido, es algo parecido”, luego vendría otro tema nuevo “Bandeja de Plata” el cual muy acertado al panorama político nuestro y un poco conspirativo como a mí me gusta, mi voz al cielo decía “será una suave brisa nuclear que nos dejara en los huesos o una bacteria que se expandirá y contagiara sin darnos cuenta” NWO pienso yo, me encanta esta canción la cante a todo pulmón, luego la guitarra daba paso a “Cuna de Caín” yo pienso que Bunbury vino a El Salvador y en 3 días compuso esta canción, que temazo, mi garganta se quedaba sin aliento solo la chela calmaba ese clamor, segundo a segundo desvanecía mi voz, el público en completo éxtasis, luego al sonar los acordes de “Parecemos Tontos” fue un grito inmenso de todo el público y una balada excelente “Acciones y facciones que no me convencen y el reflejo en el espejo está loco de atar” el tiempo pasaba y no podía ser Enrique estaba en la cúspide en su carrera “Mas haya hasta donde no alcanza la vista, llegaban mis expectativas” más que cumplidas y satisfecha.
Luego no sabía que canción vendría el ritmo me parecía desconocido concentre mis oídos y alcance a gritar a lo lejos se me “habían atascado las ideas” y reconocí la letra por fin “Ayer teñí de color sangre mis sueños” regalos que a nosotros los que hemos visto pocas veces a Enrique nos otorgaba, mientras él dijo esto es algo del Espíritu del Vino, jamás la había escuchado en vivo de la misma garganta del maestro, sin duda la dadiva de la noche, era el momento del asalto al Parnaso (ya no existe dicha librería) y “morder el Anzuelo y caer en la trampa” una joya del “Viaje a Ninguna Parte” la gente la canto de principio a fin y se deshizo de su chaqueta y podíamos ver al reverso en su camisa el factor desconocido “X”, la verdad que es una lucha muy grande la que se hace día a día, para salir adelante y que le des lo mejor a la familia como amantes de la música cada día que amanezco triste y me dirijo por las calles a mi trabajo me acuerdo de que “Hoy te sientes distinto, porque eres distinto, lo que fue siempre lo mismo y cambio, permanecía oculto en ti y ahora esta tan claro, es un día soleado no hay confusión, despierta… Despierta de una vez” gracias por motivarme grite a mas no poder mientras sentía que perdía fuerza mi voz, pero este estribillo me daba ánimos para gritar.
Luego vendría mi canción la del peche, vemos que Enrique agarra la guitarra y comienza “El Hombre delgado que no flaquera jamás” menos Rockanrolera que la versión del Hellville Deluxe el intro, pero luego explotaría el público “Queriendo ser libre y sintiendo una simpatía natural y espontánea” grite y grite, no quería que pasara la noche, luego a la par mía tenía a mi amigo Billy de Guate y lo abrazaba mientras gritaba “Nada puede dañarme con mis amigos” en efecto faltaba gente (Ivonne y mi esposa Luzy) me acordaba de las tardes geniales aquellas parrilladas no mejor “Una barbacoa al sol” y nos regalaría la nostálgica y clásica, porque digo clásica porque Hits con Hits, se convierte en algo legendario “Hay muy poca gente” sonaba y faltaban muchas sorpresas más.
Luego era el turno de Enrique para decir unas palabras más o menos algo así: “Esta es una canción de la prehistoria, cuando hicimos el libro de las mutaciones abrimos el baúl de los recuerdos” que nos esperaría? Una sorpresa el Unísono del publico recordaba que “El Héroe de Leyenda, pertenece al sueño de un destino” escudriñando 1993 o 1994 para mí, fue la explosión mientras Billy levantaba con sus manos el Lp del “Senderos de Traición” Octubre se convertiría en Navidad para mí, luego vendría otro tema del “Viaje a Ninguna parte” “Que tengas suertecita” lo mejor de Enrique hacia nosotros y nuestra descendencia, las voces se convertían en una sola y el momento en que entraba el maestro Quino Bejar en las percusiones nos daba un regalo como le denominan al maestro Camaleónico con tanta gama de sonidos y del Pogo pasaba al baile que increíble, luego vendría el segundo tema promocional del Palosanto el cual Enrique recalco al final de su canción que “Más alto que nosotros solo el cielo” mientras que la guitarra de Jordi Mena daba unas pinceladas de los admiradores de Pink Anderson y Floyd Council, esa era mi droga a esta hora de la noche, no quería salir de Majadas el tiempo pasaba tan rápido y como dirían los 007 “Detén la noche”.
Luego vendría otro regalo, me encanta tanto la playa que cuando la diviso desde el peñasco me recuerda que quisiera “Nadar mar adentro y no querer salir” estábamos en “La prisión del deseo” eso era todo para mí, contra corriente, cante y cante la garganta desgarrada nada que otra chela no pudiera curar, luego la guitarra conmovería a todo Guatemala, siempre he creído que los “Caprichos, manías, contradicción o atrevimiento, descaro, groserías, oposición y menos precio” se convertirían en aquel Vagabundo que había aprendido que le pertenecía a “Todo el mundo” ese caso era nuestro aquella noche y cada frase a lo largo del tiempo las he usado como “música como terapia para sanar las heridas del alma” esa noche no había fronteras, barreras y países, éramos C.A. unida en un clamor y pues paso lo que no me esperaba de la noche.
“De las brasas de una constelación, al mundo perecedero bendecida fue la causa de mi fortuna” esa momento no fue de constelaciones ni estrellas, sino de un portal dimensional, bajaba un Héroe a rescatarnos y a recordarnos que “He oído que la noche es toda magia” vi a Enrique en la cúspide de su carrera, desafiar la seguridad y dar la mano a todos aquellos que estábamos cerca de la barda, ese momento quedara guardado en mi memoria, fue el paso del umbral entre lo creíble y lo increíble recuerden que “la realidad supera la ficción”, jamás olvidare aquella imagen de mi memoria, como describirlo fácil “no encuentro palabras para decirlo y a veces siento que el pensamiento es un idioma de signos sin sentido” agonizaba la noche y se despedirían del público.
Era el momento de una vez más abrir el Cabaret y que en una noche intima existiera 3 Rounds a una sola caída, a las puertas del bar me recuerda que “De pequeño me enseñaron a ser mayor, de mayor quiero aprender a ser pequeño” con una joya del Pequeño se abrió el Cabaret con “De Mayor”, luego vendría la mítica canción de Guatemala y el acordeón de Jorge Rebenaque nos daba la pauta a divisar el barco y acordarnos a los Salvadoreños que “Porque haya donde voy me llaman el Extranjero” antes de escuchar la parte filosófica de la canción, con un beso les decía a ellos “En Antigua quisiera morir”, era la cúspide del clima, e invito a los que estaban en las gradas se pusiera de pie y se acercaran, agarren su copa el Cabaret estaba en lo alto con “Me calaste hondo y ahora me dueles” cambie el tequila por cerveza, había un solo ganador en este duelo, el público C.A. el viaje había valido cada segundo la espera, luego cerraría sus puertas el Cabaret y en ese momento se habría el “Libro de las mutaciones” para trasladarme y pedirle a Sabina que fuera “Cigarrillo en tu boca, taxista en Nueva York” que me llevara a un bar de Jazz y escuchar este tema con un pianista “Todo valió un zarpazo al corazón” al momento de escuchar “Quien pudo ser quiero que seas tú” desapareció el bar y volví al Fórum Majadas no tenía en mis brazos a mi esposa Luzy para abrazarla y decirle “Cariño, mi vida, criatura de Rubí”, NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO “Aunque no deba suplicarte, ven dímelo otra vez”.
Me temía lo peor era momento de despedir al “Cocodrilo Astronauta soy en órbita lunar” no te vayas Enrique la única voz que distinguía y que era compatible con mi garganta “Desde hoy no temas nada no hace falta ya, todo se fue con el huracán” casi se me salen las lágrimas “Lady Blue” regresaba a su dimensión la cual se recuerda, aprende y entiende que su mutación con el tiempo le dio a su musa y la oda a José Girl nos despediría con esa joya “Mi bálsamo del Perú” mientras las parejas se abrazaban y se besaban Enrique parecía un chiquillo enamorado con un ramo de rosas en sus manos que solo el sabia para quien era, mientras se despide y se retira del escenario los Santos Inocentes se juntan y dan un giro progresivo a “La Constante”, se encienden las luces y las 2 horas que duró el show pasaron a ser un segundo en mi vida que reflejo en esta reseña, mientras regreso a casa recuerdo que “And Darling, Darling Stand by me” fue un sueño cumplido casi imposible gracias a FD Tours.
Regresamos a San Salvador a esa hora a San Salvador El Salvador llegue sin dormir a las 6:00am…
Un Saludo a los Camaradas que ahí andaban: Israel, Orlado FD Tours, Lobo, Milo y su esposa, Pilo (que gusto verte). Dany Sobredosis y su Papa, Edward, Danilo, Fernando, Anthony, Oswaldo, Mario, Cristian, Bianca, Kenneth, Silvia, Julio, Jonathan, Roberto, Jose, Mirna, Roberto, Claudia, Elena, Pancho, Billy Saravia, a todos los Camaradas que me puedo y no me acuerdo de sus nombres, a los hermanos Guatemaltecos, Hondureños, Nicaragüenses y Salvadoreños, Gracias a mis hermanos Juan Carlos Martínez “Chitas”, Rocko Cancerbero del programa “Noches de Rock en Tu Idioma”, Mario Sobredosis por el apoyo, me despido con aquellas palabras recordando que “Estos son mis dominios, desde esta Atalaya, hasta donde la vista alcanza, nada de lo que vez es mío” Nos vemos Camarad@s!!!
Esta reseña fue escrita por Salvador Ramirez el maximo coleccionista de Helloween en el pais.
